Y sin embargo, de repente.
Amasijo cableado de sacudidas
positivas.
Despierto, cerrados, sumido en esta
frugal inmolación matutina.
Enlaces hechos a cortocircuitos.
Sol, pequeña bombilla
enrejada, luz naranja y escondida.
Click, chispazo, abrazo y pérdida.
¿Duele?
Dolió, pero no hay llama ni brilla,
no arde, no rigen ya
básicos preceptos de voltaje,
de anatomía.
Fluorescencia gaseada,
lumbre eléctrica,
vello magnético,
juego de enchufes anegados.
Elige, decisión luminosa y repentina.
Vuelve el apagón gradual,
inercia temporizada y premedida.
Volverás calladito,
en la mano la cerilla.
Entonces despierta,
apaga
y vámonos,
como de despedida.
3 comentarios:
me encanta el uso de tantos adjetivos, tantos sustantivos seguidos , muy bueno ^^
me gusta me gusta ^^
Muchas gracias! La verdad es que la electrcidad me parece muy sugerente, da pie a muchas metáforas y queda bonico jeje
Estoy de acuerdo.
Sobre todo con lo de las metáforas; no sé por qué pero da mucho juego y se sacan varios sentidos de ello :)
Charlotte
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